Todo comenzó hace más de treinta años, si no, es más. Y es que fue en noveno de secundaria, cuando me puse a duplicar el experimento de los guisantes de Mendel, fue donde mi interés por las ciencias abrió el camino.
Luego crear un laboratorio, con cosas de fácil acceso, como frascos, tubos de vidrio, bombillas en fin algo que llego a los temas de la química, que entre discusiones con la profesora del curso en la secundaria, fue lo que llevo a que hoy soy lo que hago.
Y claro hoy por hoy, soy un químico con experiencia en el campo del caucho que ha llevado entre buretas y balanzas la módica suma de 25 años, claro que el universo me lleva miles de millones de años realizando las más increíbles reacciones que la humanidad jamás se había imaginado.